La cascada infinita de Escher existe en el mundo real

C. Escher nos legó un mundo de imposibilidades físicas y engaños a nuestros sentidos.

Algunas incluso han sido llevadas al cine en películas como “Origen”, otras constituyen la fijación de personas que no se quedan tranquilas hasta que burlan los efectos ópticos bidimensionales de las ilustraciones de Escher y los hacen realidad en nuestro mundo tridimensional.





La célebre ilustración en la que una cascada nos hacía seguir el curso del agua hasta que sorprendentemente seguía su curso hasta volver al lugar desde donde había caído siempre nos ha fascinado.


Un efecto óptico que aparentemente sólo se podía deber al engaño de pensar en tres dimensiones mientras estamos observando una imagen bidimensional. Pero hay algunas personas empeñadas en retorcer la realidad, como este hábil ciudadano, que ha construido un modelo real basado en la ilustracion escheriana, ha echado agua… y sin trucos ópticos ni máquinas que muevan el agua ha conseguido lo que parecía imposible.



Ya puedes empezara estrujarte las meninges, no está trucado por ordenador ni nada… esa es la gracia.


gizmodo