El canal emitirá en un principio 4 horas y media de programación en tres dimensiones, que se repetirá cada día dos veces, según recoge la BBC. En Internet ya se ha generado cierta expectación, así como cierto debate. Hay quienes no están dispuestos a utilizar las gafas y prefieren esperar a un servicio que omita su uso.
Desde la Administración Estatal de la Radio, Cine y Televisión, su líder Cai Fuchao, ha sugerido que el nuevo servicio de tres dimensiones podría generar un gran beneficio para la industria. Esto se lograría en el caso de que se remplace una parte considerable de los 500 aparatos que existen en China para ver la televisión, siendo sustituidos por tecnología adecuada para la recepción en 3D.
Los beneficios de disponer de un canal en tres dimensiones van más allá. En términos generales supone un salto hacia delante en el sector audiovisual, abriendo nuevas puertas para la elaboración de programas y la comercialización de servicios. “El lanzamiento del canal 3D en pruebas es un paso significativo en el desarrollo de la televisión en China”, ha hecho hincapié Fuchao.
China no es el único país que ha puesto en marcha un canal de televisión en tres dimensiones. Japón, Corea del Sur e India también han lanzado iniciativas del mismo estilo. Poco a poco, al igual que está ocurriendo en el cine, el 3D están entrando en la pequeña pantalla. Es posible que – también haciendo la comparación con el sector cinematográfico – la nueva tecnología sea un reclamo para diferenciar la oferta del contenido presente en Internet.
Tweet |